jueves, 7 de abril de 2011

Lunes 4 de abril de 2011

Uff que presión!!

Un par de días sin escribir y la gente ya esta metiéndome presión de porque no he dado señales…

Pues la verdad es que he estado perreando un poco y además de eso he tenido algún día caótico.

Los dos primeros días, lunes y martes tienen mas bien poco que contar.

El lunes apure mi ultima jornada en Australia, volviendo a pasear por Sydney, en plan jubileta sin nada mas que hacer que comprar un par de encargos de última hora, nada estresante.

Paseo con las manos en los bolsillos y viendo pasar el tiempo en algún que otro banco.

A media tarde empezó a caer una tormenta y salí corriendo para el hotel, donde había dejado las maletas hasta que a eso de las seis y media de la tarde me recogería el shuttle que me llevaría al aeropuerto.

Allí los trámites típicos y que en esta ocasión fueron bastante rápidos, por lo que no me puedo quejar.

El único dato reseñable fue lo que le sucedió al resto del equipo y que indirectamente me afectó a mí. Cogían un vuelo a primera hora de la mañana que les llevaría de Madrid a Ámsterdam donde enlazarían con otro a Kuala Lumpur. Pero algo debió de pasar con la tripulación que tuvieron un retraso de diez horas, si diez horas. Así que optaron por irse a la ciudad a ver lo más turístico del sitio, y creo que lo encontraron sin mayores problemas.

A mi me afectaba porque se suponía que yo llegaba una hora antes que ellos y que les esperaba en el aeropuerto para ir todos juntos al hotel, pero claro cuando mi red de espionajes me informa de lo que acontece, les llamo para a ver que les pasa, porque a ninguno de ellos se les ocurre llamarme para contarme nada ni avisarme que van a llegar diez horas tarde, y producción me dice, bueno cuando llegues te buscas la vida (vamos, como siempre), coges un taxi, vas al hotel y te peleas por la habitación.

Así que nada, eso hice, llegué, pelee por un taxi que me intento cobrar el doble de lo que valía la carrera, llegada al hotel donde por supuesto no tenía habitación y a pelearme por conseguir una que me permitiese dormir un rato más, porque las ocho horas y pico de vuelo me las pegué dormido.

Así de entretenido fue mi lunes.

No hay comentarios: